Visión budista de Saturno en la casa sexta.

   Saturno en la casa sexta genera el deseo de trabajar para organizaciones grandes. Esta posición astrológica busca estructura en el sitio de trabajo por razones de seguridad. Las dependencias de gobierno, instituciones educativas o de salud y grandes corporaciones resultan muy atractivas como fuentes de empleo. Si el individuo trabaja por su cuenta, suele decidirse por ocupaciones que le ofrezcan estabilidad.

   Una actitud deficiente por parte del individuo da paso al complejo de inferioridad y obstaculiza el progreso. Otro efecto nocivo de Saturno transforma al individuo en un tirano dentro de su trabajo. Causa ansiedad y deseos de controlar a todos. Esta influencia se produce desde la inseguridad.

    Con una actitud prudente llega a hacer gala de su autoridad en el lugar de trabajo y mantiene el orden donde es necesario. Con esta posición de Saturno, los puestos de supervisor o de dueño de un negocio son favorables para el individuo. En tal caso, el ingrediente más importante es la actitud compasiva que desea el bien de los demás. Esto garantiza un acercamiento armonioso a las otras personas. Un corazón compasivo no es temible como lo es el de alguien que abusa de la autoridad.