Visión budista de Neptuno en la Undécima Casa
Neptuno en la undécima casa revela una sólida conciencia social. La antena de la sensibilidad se orienta hacia la sociedad. Esto puede ser una bendición y una maldición. Si esta influencia no se comprende bien, la persona llega a sentir miedo y es supersticiosa en relación con sucesos importantes. Su sensibilidad se dirige hacia grupos grandes de gente, y entonces puede emerger un sentimiento de "desbordamiento" personal. Si su actitud vital es negativa, tenderá a desconfiar del gobierno y de la sociedad.
Un acercamiento comprensivo hacia la vida da la capacidad de percibir lo que sucede dentro de cualquier grupo u organización. Esta colocación posee una antena orientada hacia el mundo que funciona como un barómetro que registra el pulso social. Este rasgo es excelente en maestros o en gente que trabaja con multitudes. El individuo es capaz de responder con rapidez al temperamento de las masas y de ajustar el contenido de sus enseñanzas. Los diseñadores de modas y publicistas se benefician de esta ubicación.
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