La Casa Octava

  Esta casa se encuentra en paralelo y afinidad cona Escorpio, Plutón y el elemento agua. Dice la tradición que es la casa de la muerte, aunque su significado va mucho más allá de la muerte del nativo, de la que sin duda también nos informa.

  Efectivamente, la casa octava nos habla de cómo será nuestra muerte y sugiere la posible duración de la vida. Así, Marte o Urano en este sector indicarían un final violento o inesperado, y en muchos casos precoz. Pero si es Saturno quien se encuentra ahí, y además bien aspectado, entonces el nativo tendrá una vida larga y un final de muerte natural.

  Rige así mismo otro tipo de muertes que no se refieren al cuerpo físico, como son las grandes crisis, transformaciones y metamorfosis del nativo, los cambios profundos y las renovaciones que deberán sufrir a lo largo de su vida.

   Esta casa controla las energías internas y secretas que actúan a nivel inconsciente, las emociones más profundas dels er humano, que a menudo tiende a ocultar o negar (rabia, odio, resentimiento), y que habitualmente proceden de traumas o frustraciones de la infancia, los impulsos e instintos que emanan de nuestro lado más primitivo o animal. La presión que estas energías ejercen sobre nosotros nos impulsan a cambiar. Muchos psicólogos tienen en este sector al Sol u otros planetas importantes. Se relaciona también con el mundo espiritual y el más allá o mundo astral o summerland, por ello para muchos ocultistas, magos y videntes tienen en ella numerosos e importantes planetas.

  

Mundo Astral o Summerland -Tierra de Verano-

  Finalmente, aunque a veces se omite o se pasa por ello muy de puntillas, esta casa tiene una fuerte relación con la vida sexual, el orgasmo yla fusión con la pareja. La unión más íntima y profunda entre dos seres humanos tiene, por un lado, un gran efecto transformador y regenerador en el nativo, y al mismo tiempo es causa de una nueva vida. Por ello, si Venus se encuentra en este sector, el nativo tendrá una vida sexual muy feliz y además con la persona que ama, pero si lo ocupa un Saturno afligido, cabe la posibilidad del celibato o de sufrir frígidez o impotencia.

  Dada la vinculación de esta casda con la muerte, se relaciona también con las herencias y legados. Al ser opuesta a la casa segunda, que rige las ganancias del nativo, la casa octava nos habla del dinero de la pareja o del que se recibe de los demás. Así, Júpiter en dicho sector puede augurar un cónyuge rico o una importante herencia, pero si  es Saturno quien se encuentra ahí es posible que sea el nativo quien tenga que ayudar económicamente al cónyuge.

   Para terminar solo añadir que en la astrología esotérica, esta casa nos informa también de cómo seremos en nuestra próxima encarnación -si es que nos volvemos a reencarnar- y de que tipo de vida tendremos.