Las Edades Tradicionales de los Planetas

Durante la Antigüedad, eran conocidos siete planetas, Urano, Neptuno y Plutón no habían sido descubiertos. Los astrólogos del período clásico establecieron una relación entre cada uno de los planetas conocidos, y una etapa de la vida humana. Así, cada momento de la existencia, está regido por una energía planetaria determinada.

Estos siete planetas se dividen en “personales”: el Sol, la Luna, Mercurio, Venus y Marte, mientras que Júpiter y Saturno, afectan tanto a la persona como a un grupo social, por lo que son llamados “sociales”. Desde este punto de vista de la Astrología clásica, se observa la influencia de cada planeta en un orden general y primario, a nivel básico.

Según el estado cósmico que tiene cada planeta se puede saber como nos irá en cada una de las edades:

La Luna, 0-4 años

La Luna es el astro que nos gobierna en la más tierna etapa de la vida. La Luna es hermosa y redonda, como el rostro de un bebé, y rige el mundo de lo inconsciente, lo primario, lo básico, la sensibilidad. Es el momento de la vida en que predomina el sueño, la vida tranquila, el contacto con la madre, y los instintos básicos.

Mercurio, 5-14 años

Ese bebé ya ha sido cuidado con ternura, ya se relaciona con el entorno y desarrolla su propia personalidad e inteligencia. Lentamente deja el seno materno y comienza un ciclo más social, donde se relaciona con grupos, y amigos. La energía de Mercurio se relaciona con ello, también con la palabra y la comunicación, el aprendizaje y el dominio de la escritura.

Venus, 15-22 años

Venus, el planeta del placer y la sensualidad, domina esta etapa de descubrimiento de la sexualidad, la ilusión amorosa, el tiempo del desarrollo de los sentimientos. Comienza la búsqueda del amor y el placer erótico, el deseo de belleza en el otro, también en el cuerpo propio.

Sol, 23-42 años

Es la etapa de realización en la vida, la integración en la sociedad organizada. El Sol aporta vitalidad y alegría, ambición y capacidad para realizarse a uno mismo. Se imponen las ideas de cómo el individuo desea vivir su vida. La creatividad está en su esplendor.

Marte, 43-56 años

El hombre se acerca a la mitad de su existencia, y es en ese momento, que el aguerrido Marte comparte su fortaleza para luchar contra las adversidades. La lucha y la creatividad son características bien marcianas, y ayudan a enfrentar la competencia, a luchar por proteger a la familia y a defender el trabajo.

Júpiter, 57-68 años

Una vez que el individuo ha ganado su lugar en el mundo, llega el momento de pensar en el sentido de la existencia. La relación que se establece con el entorno es más segura, teñida de sabiduría. Júpiter es el planeta de la expansión y la sabiduría. La persona es más comprensiva, porque ha aprendido de la vida.

Saturno, 69-98 años

Con la vejez, y la falta de vitalidad, la persona tiene a la introspección y a cierto pesimismo, a vivir de los recuerdos. La rigidez es una característica de Saturno, es la influencia que restringe y contrae, y en la antigüedad se lo conoció como el “Maléfico Mayor”.