Visión budista de Venus en la casa décima.
Venus en la décima casa acelera las señales de éxito. Crea el deseo de obtener satisfacción inmediata en cada nueva actividad. Los objetivos serán interesantes en la medida en que sean placenteros. El deseo de satisfacción es predominante con esta ubicación de Venus. Sin embargo, puede haber obstáculos si las metas requieren esfuerzos a largo plazo. Esto se acentúa en los casos en que existen pocas retribuciones a corto plazo, y la principal causa de ello es el aburrimiento. Algo que equilibra esta ubicación es el trabajo con gente. Los proyectos altruistas proporcionan satisfacción. Es sabio con esta posición de Venus elegir metas que traigan alegría a los demás porque pueden realizarse rápidamente. Aun si la meta principal es la iluminación, debe planearse por fases, con el propósito de conservar el interés.
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