Segundo Ruiz - Astrología

   Aunque los efectos son en esencia los mismos que en la conjunción, en muchos de estos casos la potente energía fusionada entre los dos planetas puede canalizarse mal o desarrollarse de un modo más tenso. Estos nativos sufrirán entonces y causarán a otros, fuertes y radicales crisis en la vida material y  espiritual. La disonancia, por otra parte, es también un estímulo para la creatividad, aunque en este caso sobre todo de naturaleza original y que va contracorriente.    Estas prsonas reaccionarán de forma explosiva o violenta ante cualquier amenaza que afecte a su libertad o independencia. Pueden asimismo ser víctimas o sufrir las consecuencias de cambios violentos o destructivos en el ámbito político, social o económico. Tienen predisposición al fanatismo y a la acción extremista, un temperamento explosivo y cierta tendencia a involucrarse o verse envuelto en actos violentos o peligrosos. A pesar de todo, hay que advertir que bajo estos aspectos han nacido grandes personalida

   Veremos los mismos efectos que en la conjunción pero de un modo más suave, positivo o constructivo. Estos nativos poseen personalidades dotadas de fuerte voluntad, con una vocación reformadora y transformadora, tanto en lo que respecta a sí mismos como en todos los ámbitos de la vida y la sociedad.  Están capacitados para captar y canalizar grandes fuerzas de la naturaleza de un modo creativo. Tienen asimismo un talento pionero y abrirán nuevos caminos en cualquier campo de actividad. Los atrae e interesa profundamente la vida después de la muerte y todo lo relacionado con el mundo esotérico y espiritual. Estos aspectos favorecen el talento y el pensamiento avanzdo. La experiencia indica que son frecuentes personas  de gran elevación espiritual, que llevan a cabo grandes reformas y transformaciones en este ámbito. Un ejemplo lo podemos ver en la Carta Natal de Santa Teresa con un trígono entre Urano y Plutón. Carta Natal de Santa Teresa de Ávila

   Esta conjunción tiene que ver con fuertes impulsos regeneradores y revolucionarios que anidan en el interior de estas personas, que en algunos casos ueden ser temerarias y peligrosas, ya sea para ellos o para sus semejantes. Por otro lado, son gente llena de fuerza creativa y con un punto de genialidad. Son los grandes reformadores y transformadores de la sociedad, los regeneradores de las viejas instituciones y los artifices del progreso.     Estos nativos poseen una voluntad de hierro y vivirán, y al mismo tiempo propiciarán a otros, grandes procesos de muerte y renacimiento en todos los campos de la vida humana: política, sociedad, ciencia, arte, espiritualidad, etc. Pueden utilizar su gran fuerza con un fin positivo o negativo. Son terriblemente independientes y recurrirán a lo que sea para liberarse de cualquier persona o situación que los condicione.     Esta conjunción la tiene  por ejemplo el príncipe Felipe. Carta Natal del Príncipe Felipe de Borbón.