Ésta es una de las combinaciones más duras y dolorosas en relación con el mundo de los sentimientos. La maternal y sensible Luna se fusiona con el terrible y severo Saturno, un planeta maléfico, aunque al mismo tiempo es un aspecto muy positivo para el crecimiento y la madurez. Esta combinación da una tendencia a ser frío, seco, lacónico, reservado, temeroso, inseguro y cauteloso. Sometidos a un recio autocontrol, los nativos son serios, austeros, espartanos, frugales, abnegados y trabajadores hasta el agotamiento. Así como estoicos, pacientes y perseverantes. Al mismo tiempo son muy autodisciplinados, y el sentido del deber es muy importante para ellos, que creen que la obligación está antes que la devoción. Les es por tanto muy difícil escapar de las responsabilidades que los esclavizan. Muy prudentes y previsores, pocas cosas los pillan por sorpresa, y el desarrollo de su sentido práctico hace que la dura reali...